INTERROGANTE: No puedo pasar mucho tiempo con mis hijos, pero me aseguro de que las horas que estamos juntos sean significativas.
¿Está usted de acuerdo con la idea de que la calidad del tiempo que los padres estén con los hijos es más importante que la cantidad?
RESPUESTA: Me temo que ese concepto carece de lógica. La pregunta es: ¿por qué tenemos que escoger entre las virtudes de la cantidad en contraste con las de la calidad? Nosotros no aceptamos que se nos obligue a hacer esa elección en ninguna otra área de nuestras vidas. Así que, ¿por qué es sólo importante en cuanto a nuestros hijos?Permítame darle un ejemplo de esto. Supongamos que todo el día usted había esperado que llegara el momento de comer en uno de los mejores restaurantes de la ciudad. El camarero le trae el menú y usted pide que le sirvan el filete asado más caro. Pero cuando llega la comida, ve un pequeño pedazo de carne en medio del plato. Cuando usted se queja del tamaño del filete, el camarero dice: "Señor, sé que la porción es pequeña, pero es de la mejor carne que se puede comprar. Usted nunca podría conseguir un pedazo de carne mejor que éste. En cuanto a la porción, espero que comprenda que lo importante no es la cantidad sino la calidad".Usted objetaría, y con muy buena razón. ¿Por qué? Porque tanto la calidad como la cantidad son importantes en muchas áreas de nuestras vidas, incluyendo cómo nos relacionamos con nuestros hijos. Ellos necesitan nuestro tiempo y lo mejor que tengamos para darles.Mi preocupación es que tal vez el argumento de la calidad en contraste con la cantidad ha llegado a ser una racionalización mal disfrazada, para no darles a nuestros hijos ninguna de las dos cosas.
Las preguntas y respuestas han sido seleccionadas del libro "Respuestas Confiables," por el Dr. James Dobson publicado por la Editorial Unilit.
